Como llegar sano a la vejez
Cómo vivir más tiempo
Cuando nos miramos en el espejo por la mañana, no solemos ver ninguna diferencia en nuestro rostro con respecto al día anterior. Pero cuando miramos fotos antiguas de nosotros mismos, enseguida vemos lo jóvenes y diferentes que parecíamos entonces. Y, por desgracia, no son sólo los cambios externos los que se producen con los años, sino que hay otros efectos secundarios del envejecimiento: más dolores y molestias, peor memoria, menos resistencia, vitalidad y movilidad.
Independientemente de la edad que tengas ahora mismo y de las dolencias relacionadas con la edad que ya hayas notado en tu propio cuerpo, todos tenemos que aceptar que nos hacemos mayores y adaptarnos a nuestra edad. La pregunta que deberíamos hacernos es ¿Cuál es la mejor manera de vivir para garantizar la salud y la felicidad a medida que envejecemos?
Afortunadamente, la mayoría de nosotros ya no tenemos que envejecer en las mismas condiciones que nuestros padres o abuelos. Hoy en día, la atención médica para las enfermedades relacionadas con la edad es mucho mejor y tenemos más información y conocimientos sobre lo que es realmente saludable.
Como resultado, cada vez vemos a más personas con un aspecto saludable y joven incluso en la vejez. El famoso médico estadounidense Andrew Weil, defensor de la medicina alternativa, habla en su libro “Healthy Aging: A Lifelong Guide to Your Well-Being” sobre 12 formas que todo el mundo puede hacer para envejecer con salud.
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Son muchas las capacidades físicas que disminuyen con el envejecimiento normal, como la fuerza, la rapidez y la resistencia. Además de estos descensos relacionados con los músculos, también se producen cambios en la coordinación de los movimientos del cuerpo. En conjunto, estos cambios significan que, a medida que envejece, es posible que no pueda realizar actividades como correr para coger el autobús, caminar por el jardín, llevar la compra a casa, mantener el equilibrio en una superficie resbaladiza o jugar a la pelota con sus nietos tan bien como antes. Pero, ¿tienen que deteriorarse estas actividades? Veamos por qué se producen estos descensos y qué puede hacer para mejorar realmente su fuerza y coordinación.
Los cambios en la fuerza, la rapidez y la resistencia con la edad están asociados a la disminución de la masa muscular. Aunque entre los 20 y los 40 años no se produce un gran descenso de los músculos, a partir de los 40 años puede producirse un descenso del 1% al 2% anual de la masa corporal magra y del 1,5% al 5% anual de la fuerza.
La pérdida de masa muscular está relacionada tanto con la reducción del número de fibras musculares como con la reducción del tamaño de las mismas. Si las fibras se vuelven demasiado pequeñas, mueren. Las fibras musculares de contracción rápida se encogen y mueren más rápidamente que otras, lo que provoca una pérdida de velocidad muscular. Además, la capacidad de reparación de los músculos también disminuye con la edad. Una de las causas de estos cambios es la disminución de las hormonas de construcción muscular y de los factores de crecimiento, como la testosterona, el estrógeno, la dehidroepiandrosterona (más conocida como DHEA), la hormona del crecimiento y el factor de crecimiento similar a la insulina.
Envejecimiento saludable
Sabe que el envejecimiento probablemente le cause arrugas y canas. ¿Pero sabe cómo afectará el envejecimiento a sus dientes, su corazón y su sexualidad? Averigüe qué cambios puede esperar a medida que envejece, y cómo promover la buena salud a cualquier edad.
El cambio más común en el sistema cardiovascular es el endurecimiento de los vasos sanguíneos y las arterias, lo que hace que el corazón tenga que trabajar más para bombear la sangre a través de ellos. Los músculos del corazón cambian para adaptarse a la mayor carga de trabajo. La frecuencia cardíaca en reposo se mantendrá más o menos igual, pero no aumentará tanto como antes durante las actividades. Estos cambios aumentan el riesgo de sufrir presión arterial alta (hipertensión) y otros problemas cardiovasculares.
Con la edad, los huesos tienden a reducir su tamaño y densidad, lo que los debilita y los hace más susceptibles de sufrir fracturas. Incluso pueden volverse un poco más bajos. Los músculos suelen perder fuerza, resistencia y flexibilidad, factores que pueden afectar a la coordinación, la estabilidad y el equilibrio.
Los cambios estructurales relacionados con la edad en el intestino grueso pueden provocar más estreñimiento en los adultos mayores. Otros factores que contribuyen a ello son la falta de ejercicio, no beber suficientes líquidos y una dieta baja en fibra. Los medicamentos, como los diuréticos y los suplementos de hierro, y ciertas enfermedades, como la diabetes, también pueden contribuir al estreñimiento.
Cómo envejecer bien
Son muchos los factores que influyen en un envejecimiento saludable. Algunos de ellos, como la genética, no están bajo nuestro control. Otros -como el ejercicio, una dieta sana, ir al médico con regularidad y cuidar de nuestra salud mental- están a nuestro alcance. Las investigaciones respaldadas por el NIA y otros organismos han identificado las medidas que puede tomar para ayudar a controlar su salud, vivir con la mayor independencia posible y mantener su calidad de vida a medida que envejece. Siga leyendo para saber más sobre la investigación y los pasos que puede dar para promover un envejecimiento saludable.
Aunque los científicos siguen investigando activamente cómo ralentizar o prevenir el deterioro de la salud física relacionado con la edad, ya han descubierto múltiples formas de mejorar las posibilidades de mantener una salud óptima en el futuro. Cuidar la salud física implica mantenerse activo, elegir alimentos saludables, dormir lo suficiente, limitar el consumo de alcohol y gestionar de forma proactiva el cuidado de la salud. Los pequeños cambios en cada una de estas áreas pueden contribuir en gran medida a un envejecimiento saludable.
Tanto si le gusta como si lo odia, la actividad física es una piedra angular del envejecimiento saludable. Las pruebas científicas sugieren que las personas que hacen ejercicio con regularidad no sólo viven más tiempo, sino que también pueden vivir mejor, lo que significa que disfrutan de más años de vida sin dolor ni discapacidad.