
Como sanar la herida emocional del rechazo
Cómo curar el trauma del rechazo en la infancia
Contenidos
A lo largo de los años, me he dado cuenta de que todas las enfermedades incapacitantes se desarrollan después de que el cuerpo muestre muchas pequeñas señales. Una fuerte herida emocional de rechazo no curada puede llevar a una persona a negar o ignorar estas señales.
Nuestro cuerpo nos habla a través de nuestros problemas físicos para recordarnos la importancia de amarnos a nosotros mismos. Teniendo en cuenta que lo opuesto al amor es el odio, he llegado a la conclusión de que cualquier enfermedad importante indica un odio hacia uno mismo que está directamente relacionado con la herida del rechazo. Cuanto más fuerte es, más rápidamente se manifiesta la enfermedad. La herida del rechazo es la más sufrida psicológicamente porque no sólo nos rechazamos a nosotros mismos, sino que a menudo nos sentimos rechazados por los demás.
La herida del rechazo se desencadena al nacer con el progenitor del mismo sexo. Lleva a la persona a odiar (a menudo inconscientemente) a ese progenitor en el que ve y rechaza lo que cree de sí mismo. El odio es imposible cuando somos indiferentes; las emociones fuertes provienen de nuestra sensibilidad. Sin embargo, las personas que sufren las heridas del rechazo y la injusticia pueden ser consideradas a menudo como “frías”. Especialmente expertas en ocultar su gran sensibilidad, en reprimirla en lo más profundo de su ser, estas personas no saben cómo manejarla. Creen que si no son sensibles a su sufrimiento interior, sufrirán menos, cuando en realidad el sufrimiento se hace aún mayor.
¿Cuánto tiempo se tarda en curar tras un rechazo?
La mayoría de las personas empiezan a sentirse mejor 11 semanas después del rechazo y manifiestan una sensación de crecimiento personal; del mismo modo, tras el divorcio, las parejas empiezan a sentirse mejor después de meses, no de años. Sin embargo, hasta el 15% de las personas sufren más de tres meses.
¿Cuál es la herida central del rechazo?
La herida del rechazo está conectada a tu “ser” Alguien que tiene la herida del rechazo piensa que no es lo suficientemente bueno para recibir amor: Puede pensar que no es lo suficientemente bueno para agradar. Puede pensar que no es atractivo o atractiva por alguna otra razón.
Cómo curar el trauma del rechazo
Esta herida está relacionada con los niños que han sentido una profunda soledad. Se crea, generalmente, entre los 0 y los 3 años de edad. Tal vez uno de los padres no estaba presente o, aunque lo estuviera físicamente, existía una gran barrera emocional que no permitía al niño sentir su presencia plenamente. Suele ocurrir predominantemente con el progenitor del sexo opuesto. Su máscara o mecanismo de defensa es la dependencia. Esto les hace depender emocionalmente de sus parejas y de su círculo más cercano. Sienten que realmente no pueden valerse por sí mismos.
Se genera desde el momento de la concepción, hasta el primer año de edad. Se vive, principalmente, con el progenitor del mismo sexo. El sentimiento es de no aceptación, sintiendo que no son plenamente aceptados por el cuidador. Esto puede ocurrir por razones de hombre, por ejemplo, cuando la madre acaba de dar a luz y tiene mucho dolor y no puede sostener al bebé, o en el caso de una depresión por parte del progenitor. La máscara se escapa. Las personas con esta herida pueden aislarse, o cuando son rechazadas en la vida adulta, tienden a hacer un corte definitivo o a desaparecer.
Cómo aceptar el rechazo de un chico
La educación sobre qué hacer en caso de sentirse rechazada es importante para mantener la salud emocional. El rechazo puede considerarse un tipo de herida. Precisamente por ello, es esencial aplicar el concepto de “Primeros auxilios emocionales” para afrontar la herida del rechazo.
La idea de los primeros auxilios emocionales es actuar en términos de autocuidado, amor propio y bienestar en respuesta al rechazo. Por desgracia, la idea de los primeros auxilios emocionales no es tan común como podría y debería ser. La gente a menudo no es consciente de que debe prestar más atención a su salud emocional.
Cuando alguien nos hace daño, es fácil perderse y rumiar el dolor. Aunque el contacto inicial del daño tiende a paralizar, también es el mejor momento para sentarse y ser consciente de la naturaleza y la causa del dolor. ¿Qué ha llevado a tu experiencia de rechazo?
Cuando comprendamos la dinámica del dolor y su causa fundamental, nos resultará más fácil centrarnos en la reconstrucción con respecto a la experiencia concreta. Cuando se está emocionalmente destrozado por el rechazo, es demasiado fácil generalizar. Esto desencadena sentimientos de disminución de la autoestima e incluso de odio a uno mismo.
Rechazo profundo
Las experiencias que vivimos en la infancia pueden tener un gran impacto en nuestra calidad de vida en la edad adulta. Pueden moldear nuestra personalidad, afectar a las relaciones sentimentales e influir en la forma de criar a nuestros propios hijos.
La mayoría de la gente puede entender fácilmente cómo el abuso físico puede afectar a un niño. ¿Y el maltrato emocional? ¿Y qué hay de las experiencias dolorosas, a menudo inevitables, que experimentan muchos niños, a pesar de los esfuerzos de sus padres por mantenerlos a salvo?
Si sientes que sigues saboteándote a ti mismo, tomando malas decisiones en tus relaciones o reaccionando de forma exagerada ante ciertas situaciones, puede que sea tu niño interior herido el que esté actuando. Su niño interior representa sus aspectos infantiles, sus recuerdos personales, sus esperanzas y sus sueños. Si trata de llamar su atención, puede estar pidiendo a gritos que se cure una vieja herida.
Hablar con un coach de relaciones puede ser de gran ayuda en este sentido. También puedes iniciar tu camino para convertirte en un adulto sano descubriendo tus heridas de la infancia por ti mismo. Sigue leyendo para saber cómo puedes ponerte en contacto con tu niño interior y curar las heridas emocionales.